Se preguntarán qué hace esa imagen, pues resulta que hoy vengo a hablarles sobre el Dilema de Crecer (Me refiero a volverse adulto...éstos...) o al menos, lo que es para mí un dilema. Destaco que esta vez no daré un mensaje o algo por el estilo, es tan sólo un monólogo mío sobre este intrigante pero fastidioso tema que me aburre, pero que por alguna razón me digno en escribir. Sí eres mayor de 18 años quizás no te interese mucho esto, pero siempre es bueno que haya gente que me lea. (Ya sea por ocio o capricho, igual, son publicidad para mí)
He de saberse que todos nos volvemos adultos, es natural, no se preocupen. Es parte del ciclo de vida del ser humano. Es posible que te hayas dado cuenta también, sino es que no te interesa tu futuro, que el crecer conlleva a nuevas responsabilidades y todo eso (Porque nunca dejaste de tenerlas desde un principio, aunque eran diferentes y casi insignificantes), como tal, debes afrontarlas, eso es inevitable.
Pero yo NO...bueno bueno, yo no me siento cómodo con la idea. Muchos me dirán, de seguro, que aunque es una triste realidad debo de aceptarla y los más atrevidos me dirán que el crecer también trae otras libertades. Ah, sí ya lo veo venir.
Antes que nada, hay algo que explicar...
De niño, ¿cuáles eran nuestras libertades? La verdad que eran muchas, pero siempre teníamos ciertas responsabilidades, pero que sin embargo ahora las vemos como cosas sin importancia (para entonces, la historia era otra...)
No es que esté contrastando Responsabilidad VS. Libertad, que el hecho de tener responsabilidades en cierta forma viene dando algo como libertad ("¿WTF?"), me refiero a que "ser libres" no siempre significa hacer lo que queramos, que eso ya sería libertinaje. Ser libres significa, al menos para mí, poder hacer lo que podamos hacer sin que nadie más nos acatee más responsabilidades que no tienen importancia relativa.
Es decir, que los demás no nos presionen, o nos juzguen por lo que hacemos (en la palabra "hacemos" viene junto todos los verbos que nos gustan...)
Antes de seguir, me he dado cuenta que escribo en plural, a ver, intento sólo entrometerme a mí en mis palabras...de aquí en adelante es sólo mi pensar.
YO creo (Yeah) que el crecer se vuelve todo lo contrario a lo anteriormente dicho, puesto que, aunque tengamos diferentes libertades y deberes, estas en comparación a las de joven (niño o etapa juvenil) no son buenas ni agradables (El cambio de responsabilidades es más de cualidad que de cantidad). Repito, YO creo (enfatizo, YO creo)
Para mí el hecho de crecer en vez de darte nuevas libertades tan sólo te "engaña" (por decir así) otorgándote una vida que, aunque a primera vista se ve cómoda, no lo es. Es como el matrimonio (aunque nunca me he casado
--¡Pero chico! ¿Qué es lo que tú estás pensando? Ser adulto es lo mejor del mundo. (¿...?)
Pues estoy seguro que la Vida, ni siendo adulto o niño o joven, es como un pastel con su cerecita arribita (Qué me pasa...) Más seguro estoy aún que eso nunca cambia en la vida.
La Vida nunca se nos presenta tan gratamente.
Tú.-Hola
Vida.-Muy buenas tardes tenga usted, ¿cómo está? ¿Se le apetece una taza de té caliente o frío? Oh por favor, tome asiento mientras le servimos yo y mi amiga la Felicidad.
FAKE
No es que sea negativo (de hecho soy muy positivo), pero es que es una realidad latente que está ahí siempre acosándonos. Permiteme hacerte una pregunta (lanzada al aire, de seguro)
¿Sí podrías cambiar lo que tienes ahora en tu vida, apretando tan solamente el interruptor "Sí", lo harías? Sino, pues aprietas el interruptor "NO". Recuerda que sólo tienes una oportunidad, no tardes mucho.
Es gracioso, me hizo recordar aquella escena de Matrix donde le proponen al protagonista de la película la elección entre una pastilla (medicina, cápsula, como sea que lo conozcan), una era roja y la otra azul (¿No? Bueno, tiempo que no veo esa película...)
No es necesario que me respondan a mí, esa respuesta va dirigida a ustedes mismos, así que en mente contesten.
No olviden que aún sigue la regla de que todo lo que estoy diciendo es mi opinión.
El Crecer es eso mismo, una diversidad de cambios que nos afectan, la gravedad de ellos puede variar, pero los cambios más abruptos y para los que no estamos preparados son los que, además de cambiarnos físicamente, cambian nuestro ser.
Estar preparados para esos cambios requiere mucha sabiduría y fuerza, y un poco de valor (parece fórmula mágica), pero lamentablemente, la mayoría no lo tienen cuando llega la hora, y optan por "reestructurar" todo lo que pensaban de sí mismos y/o del mundo.
Eso está mal, ya que cambias lo que eres. Te vuelves una persona muy diferente a como eras. Cuando creces es seguro que te vayas percatando de ciertas "realidades" que la gente te escondía, y quizás por eso cambies un poco tu manera de pensar, pero no por eso cambies tu "pensar fundamental". Es del todo necesario que, además de madurar físicamente, hay que madurar emocionalmente, pero no "transformarse". Pero...
Es a lo que voy (al fin...)
Crecer, por mí, no hay problema, pero no estoy dispuesto a cambiar lo que soy por crecer. ¿Aja? Lo que quiero decir es que no cambiaré (primera persona de lo personal...¿?) lo que esencialmente soy y pienso.
Sí no se comprende aún, digo: Admiro mucho a esas persona que aún siendo adultas, nunca olvidan lo que son, lo que fueron desde infantes, y que mantienen en presente ahora en día. Muchas veces son sueños, deseos que se fundamentaron desde niños, amistades, habilidades, agregue usted otro más. Porque el desafío está en aquellos esfuerzos que damos por luchar por los sueños que desde niño tenemos, porque lo verdaderamente difícil está en pelear por los sueños que mantenemos desde niños. Lo exactamente brutal está en que por nada del mundo, cambiemos lo que nos prometimos cuando niños. Es todo, pero no fácil el seguir con los "primeros sueños" hasta hacerlos realidad.
Es todo, pero no fácil.
¿Se entiende? Por mí no hay problema volverme adulto, y quizás hasta al final me de cuenta que lo que he plasmado en este escrito (y en muchos otros artículos del blog) eran una realidad fantástica. Pero sin embargo, seguiré manteniendo lo que soy y me armaré de valor, sabiduría y coraje para "llevar mi estilo" a ese nuevo estándar de vida. Es fácil de entenderlo cuando eres quien lo piensa (Acertijo)
Ah, crecer, un dilema de por sí para muchos. Otros ya sabrán todo esto y quizás esto les parezca un chiste, en fin. Crecer es inevitable, lo sé. El contra argumento fatal de este artículo es que: Llegará el momento...
Aunque no aceptaré la falsa realidad de los adultos ("No todos, pero sí muchísimos", jaja, una frase de un personaje que admiro). Yo siempre seré lo que soy. Eso nunca hay que olvidar, quién eres.
Lástima que muchas personas llegan a tal etapa (ser adulto) y como no saben esto, olvidan quienes eran. Mal mal y mal...Y lo gracioso de todo es que a veces ocurre todo lo contrario, llevan lo que creen al máximo sin darse cuenta que se transforman a sí mismos. En otras palabras, El dilema se vuelve una locura.
Ok ok, creo que me extendí. Espero comentarios sí tienen algo que agregar, ya sea opiniones, cuestiones o sólo querer aportar. Saludos a todos y espero volver a escribir otro artículo parecido a este, bueno, espero. (Qué ánimo el mío)
La Vida es todo, pero no fácil. El crecer conlleva a darte cuenta de lo que eres en verdad.
PD: Queda abierto el blog oficialmente, ya lo dí de "alta" (es extraño que se dé de alta un blog...) Así que googleando encuentran también el blog (con suerte, claro)